Foro sobre el papel de las redes sociales y el servicio pro-bono en la construcción del Estado de Derecho en México
GABRIELA GARCÍA ESCOBAR1
La Facultad de Derecho de la Universidad Panamericana Campus Guadalajara junto con la Barra Mexicana Colegio de Abogados Capítulo Jalisco, conscientes de la importancia de la función del abogado como agente de cambio y servidor de la sociedad, organizaron el pasado 20 de marzo el evento denominado Foro sobre el papel de las redes sociales y el servicio pro-bono en la construcción del Estado de Derecho en México (El caso de Esperanza Reyes).
Dicho evento, presidido por el Maestro Rodrigo Lazo Corvera, contó con la presencia del Maestro José Mario de la Garza Marroquín, el Doctor Guillermo Zepeda Lecuona y el Maestro Jorge Tejeda Montaño; quienes presentaron algunas cuestiones en materia penal relacionadas con los defectos del sistema de justicia mexicano y la relevancia del papel de la sociedad civil como motor de cambio.
El primer expositor, el Maestro de la Garza, realizó su intervención presentando el caso de Esperanza Reyes, una mujer indígena que fue procesada por el delito de falsificación de moneda, debido a que pagó con un billete fraudulento en una papelería, ignorando por completo la falta de autenticidad de este medio de pago; lo cual provocó que se instaurara un proceso en su contra que tuvo como resultado una sentencia condenatoria que la envió a las Islas Marías.
El ponente expresó que conoció del asunto después de haberse agotado todos los recursos legales, por lo que tuvo que proceder a la liberación de la Sra. Reyes por medio de una solicitud de indulto al Poder Ejecutivo Federal, con fundamento en la reciente reforma del Código Penal Federal, respecto a la posibilidad de que personas sentenciadas se beneficien de dicha institución en razón de violaciones graves a sus derechos humanos, siempre que la persona no represente un peligro para la tranquilidad y la seguridad pública.
La obtención del indulto no se pudo lograr por ese medio; sin embargo, ante las manifiestas violaciones procesales y sustanciales del caso en mención, el Doctor de la Garza no cedió ante los obstáculos jurídicos, pues gracias a la tecnología y las redes interdependientes de ciudadanos se logró llevar a cabo todo un movimiento social y cibernético que sirvió para presionar la obtención de justicia y la publicidad del asunto de Esperanza Reyes, lo cual se tradujo en la concesión del indulto para la sentenciada, mediante el auxilio de una vía alternativa a la prescrita en el ordenamiento penal federal.
Ante este singular acontecimiento que le sucedió a Esperanza Reyes, el Doctor de la Garza explicó el importante papel que juegan las redes sociales y la participación de la sociedad civil en la preservación y construcción del Estado de Derecho, así como en el íntegro respecto a los derechos fundamentales. Por otra parte, se enfatizó la importancia del rol del abogado en el litigio sin fines de lucro, como el ocurrido en la situación examinada, ya que la construcción de un sistema judicial más eficaz requiere de juristas comprometidos con la sociedad y con la virtud.
En la misma línea de ideas, el Maestro Tejeda Montaño comentó su experiencia en el servicio pro-bono en materia penal, vislumbrando las fallas del ordenamiento jurídico y de su aplicación, las paradojas que presenta nuestro sistema entre legalidad y justicia, y concluyó narrando la problemática mexicana que se ve reflejada en la carencia de una correcta asesoría legal en la defensoría pública, que comúnmente termina afectando a indiciados, acusados y sentenciados de escasos recursos.
Por último, en la participación del Doctor Zepeda, se expuso un análisis estadístico sobre la situación del sistema penitenciario en México, en donde se demostró que asuntos como el de Esperanza Reyes se han convertido en la norma general. Asimismo, el ponente manifestó que la mayor parte de la actividad estatal se ha concentrado en delitos de poca trascendencia, cuestión que ha provocado que la generalidad de las personas que se encuentran cumpliendo una pena corporal sea debido a la comisión de delitos patrimoniales de poca cuantía, circunstancia que tiene dos importantes implicaciones: el olvido del principio de ultima ratio que rige al derecho penal, y la concentración del sistema en la prosecución de delitos menores, en vez de focalizar los recursos públicos en perseguir las transgresiones trascendentales a la legislación penal.
A través del diálogo que se presenció en el foro, los distintos juristas revelaron el panorama que vive el derecho penal y el sistema penitenciario en México, con sus fallas y aciertos. De la misma manera, se detallaron casos concretos en los que nuestro Estado reflejó un acceso a la justicia en donde prevalecen prácticas de corrupción y un deficiente sistema de investigación.
Por otro lado, los juristas mostraron las diferentes formas en que los estudiantes de Derecho, los abogados titulados y en general la sociedad civil, pueden contribuir a la implementación de justicia penal; ya sea por medio de la influencia de las redes sociales y la cohesión social, puesto que como se señaló mediante el caso de la Sra. Reyes, una sociedad unida y activa es un propulsor de cambio y un canal para combatir injusticias; ya sea mediante la práctica pro-bono, utilizándola como un camino que pone al jurista en contacto con la realidad mexicana, y que contribuye a desenvolver una actividad exigida por la responsabilidad que compartimos tanto con la sociedad como con el Estado. Por ello, los abogados cerraron el foro concluyendo que las consideraciones aludidas son herramientas que deben ser retomadas, debido a que ayudan a exponer ante la luz pública cuestiones legales de gran relevancia que de otra manera quedarían impunes y en el olvido.
1 Alumna de 7° Semestre de la Facultad de Derecho de la Universidad Panamericana Campus Guadalajara.